Sonia Almudévar explora la belleza de Villarejo
Hace poco tiempo la fotógrafa Sonia Almudévar compartió con nosotros esta frase: “La belleza está en los ojos del que mira”. En los días previos a la inauguración del #MuseoEfímero, espacio en el que será expuesta una serie de fotografías realizada a partir de los diálogos filosóficos con los mayores, la reitera: “Para mí la belleza es muy relativa. Aunque existan unos cánones de belleza al final creo que está en los ojos del que mira. Bajo esa premisa prácticamente cualquier cosa puede convertirse en algo bello”.
Para esta ocasión, precisamente, se aventuró a capturar las distintos conceptos sobre la belleza que emergieron de los encuentros en los que participaron personajes de Villarejo de Salvanés, quienes contaron sus anécdotas, la mayoría de ellas impregnadas de añoranza por tiempos mejores. ¿Cómo transformar en imágenes las palabras de una generación que cabalga constantemente entre pasado, presente y futuro?
La experiencia de salir a fotografiar en diferentes rincones del pueblo fue, sin duda, bastante intensa para ella. “En un día vi demasiado, más de lo que pensaba; y te das cuenta de que cada municipio tiene una riqueza espectacular si te paras a investigar un poquito. Quería ceñirme un poco al guión que habían marcado los mayores en sus charlas: vivencias, recuerdos, melancolía por lo que ya no existe y esperanza por lo que viene”.
Como a Sonia Almudévar, en lo que a su trabajo fotográfico se refiere, le gusta experimentar, le pareció todo un reto fotografiar las historias que salieron en las conversaciones. Participar en este proyecto, que justamente está ligado a la idea del arte como algo efímero, guarda relación con hurgar en “aquello que hoy está y mañana ya no, o está, pero transformado en otra cosa”.
El punto de partida siempre fue buscar la belleza de Villarejo de Salvanés, incluso, la muestra fotográfica lleva el nombre de La belleza de Villarejo. Sin embargo, considera que hablar solo de belleza sería muy frívolo. Sí, es cierto que siempre está presente la búsqueda de una estética; que puede ser en un retrato, o en un paisaje o en unas simples líneas; pero aclara que no necesariamente esa estética está tan relacionada con la belleza como parece. “Lo que para mí es bello para el espectador puede que no lo sea. A la hora de fotografiar prefiero provocar, o que mis fotos provoquen algo (lo que sea) en el espectador”.
Aunque muchos fotógrafos tienen un sello de identidad claro, ella no se siente tan identificada con esta afirmación. Más bien cree que no sigue ningún hilo conductor ni cuenta con un estilo específico definido. “No sé si es bueno o malo pero mis fotos no siguen una línea ni compositiva ni estética”. No obstante reconoce que sí existen determinados períodos; es decir, momentos en los que hace fotografía más conceptual, otros en los que usa ciertos colores. Sea lo que sea, es cierto que no se permite parar: “Siempre procuro tener un proyecto en mente para poder seguir experimentando”.
Si deseas conocer algunos detalles más acerca del trabajo que realiza esta fotógrafa, pulsa en el siguiente enlace: Sonia Almudévar