Hace muchos años, las casas de Villarejo de Salvanés permanecían siempre abiertas. Nadie se preocupaba por echar el pestillo o dar más de una vuelta a la llave. Una costumbre que desapareció con el paso del tiempo y que deja en las personas que la vivieron un sentimiento bastante parecido a la nostalgia. Esta historia, que parece lejana, es solo una de las tantas compartidas por Asunción, Coral y Mari Carmen, integrantes de la Asociación de Mujeres Alcoranas.
Dispuestas a contar sus vivencias, nos abren las puertas y nos reciben en un salón de la Casa de la Cultura. Esta tarde de primavera es propicia para echar a andar la memoria, en un ejercicio de mirar atrás en el que afloran anécdotas y recuerdos vivos que transcurrieron en un pueblo —comentan— famoso por el esparto y las rosquillas. Los paseos para recoger moras, la construcción de la Plaza de Toros entre todos los vecinos y las peripecias del tradicional Lechón de San Antón, entre las escenas más recreadas por ellas.
Este encuentro corresponde al primero de los diálogos filosóficos en el que participarán distintos personajes mayores del pueblo, con el fin de recolectar sus historias y convertirlas en relatos que serán narrados oralmente por Israel Hergón, dentro de nuestro Museo Efímero, en la Noche en Llamas.
“Cuando eres joven todo lo ves bello”, una de las frases que todavía resuena.